Los enormes beneficios de colorear mandalas

Mandala significa “círculo” o “rueda” en sánscrito. Muchos traducen a los mandalas como “círculos sagrados”, porque son representaciones simbólicas del micro y macrocosmos que habitan en su interior.

Aunque su origen es hindú, se conocen en las culturas de todo el mundo, utilizadas para meditar, profundizar en el psique humano, y atraernos al presente (al Aquí & Ahora). Se les atribuye, por tanto, un significado espiritual, energético y trascendente. Son un símbolo de totalidad, de unión y de integración de todos los planos y mundos que habitan en nosotros.

Están formados, básicamente, por un centro y diferentes expansiones de ese centro hacia los cuatro puntos cardinales. Por ello, se les asocia como una representación simbólica de la totalidad que es nuestro Ser, o el Universo mismo.

Ayudan a comprendernos por dentro y a comprender al mundo de forma intuitiva, psíquica y energética. Nos adentran en el camino a nuestra esencia con una delicadeza y sutilidad que, cuando nos queremos dar cuenta, nos encontramos sumidos en sus figuras, siluetas y colores. El mundo simbólico que siempre nos rodea abre sus puertas a través de cada mandala. Son portales para acceder a distintos niveles de percepción y consciencia, a nuestros mundos internos y a un espacio interior en donde se diluye el tiempo.

Dado que son empleados como práctica meditativa, terapéutica, de autoconocimiento, e incluso, para algunas culturas o ramas ideológicas, como un medio para alcanzar la “iluminación interior” (que es un sinónimo de la comprensión de nuestra Naturaleza real), voy a dedicar este post para compartiros los beneficios que he ido descubriendo y reuniendo sobre esta práctica creativa con efectos multidimensionales (en las distintas dimensiones y niveles de nuestra vida):

1.Ayuda a meditar, a conectarte con tu interior.

2.Contacto con tu esencia, con tu intuición, con tus sensaciones y sentimientos.

3.Aumenta el nivel de expresividad (Expresividad es siempre Sanación).

4.Ayuda a expandir tu consciencia y a aumentar tu autoconocimiento

5.Desarrollo de la paciencia y de la concentración (fortaleciendo nuestra atención)

6.Despertar de los sentidos. Desbloquea y nutre nuestro interior.

7.Comienzamos a escuchar la voz de nuestra intuición/voz interna-creativa

8.Aceptación y autoestima

9.Sanación física y psíquica a través de la expresión de represiones emocionales, mentales y energéticas

10.Reduce el estrés y la ansiedad

11.Aumenta la relajación

12.Te desconecta de las preocupaciones y te centra, conectándote con tu poder y paz interna.

13.Despierta y potencia la creatividad

14.Conecta y sana tu niño/a interior, tu alegría vital y la fuente de salud (que habitan dentro de ti)

15.Focalización de la mente y desarrollo de la motricidad fina. Favorece el desarrollo de las capacidades abstractas y el pensamiento abstracto (o, en términos más místicos, de la "mente abstracta", en concurrencia con la "mente concreta).

16.Desarrollo de la imaginación y del pensamiento multilateral, creativo

17.Aumento del entusiasmo y vitalidad

18.Ayuda al entrenamiento y construcción de una autoestima sana (basada en la propia valía, creatividad y conexión con nuestro Ser real).

19.Entrena para afrontar retos y resolución de problemas (cada color escogido es una elección entre miles de posibilidades, y su lugar, tonalidad, etc). Es una elección de manifestación y plasmación en este mundo. Con cada color, te pronuncias, plasmas y posicionas. (Esto ayuda mucho cuando padecemos de problemas de autoestima o, lo que es lo mismo, y camuflado, de indecisión).

20.Aporta Paz Interior.

En definitiva, esta práctica de pintar o colorear mandalas se convierte en un camino más de los infinitos que disponemos para re-unirnos con nuestro Ser, con todo el Universo que habita dentro y fuera de nosotros, llegando a un punto en el que nos damos cuenta de que “dentro-fuera” son dos conceptos que están fusionados realmente en nuestra vida, cuando aumenta nuestro nivel de consciencia y nuestra percepción multinivel de la realidad.

La mayoría de las cosas y prácticas sencillas son las más poderosas y sanadoras. Por ello, si quieres conectarte contigo mismo, relajarte y reducir el estrés, expresar y re-significar emociones o vivencias, o simplemente disfrutar del arte del presente y autoconocer tu momento vital a través de las formas, los colores y las sensaciones, creo que las mandalas son una ayuda muy grande, tan profunda y poderosa que, de tal sutileza con que actúa, podemos llegar a pasarlas desapercibidas.

Silenciosamente, las mandalas nos adentran en nuestros mundos internos, en los cuales, con cualquier mínimo contacto que hagamos con ellos, ya nos aportan la sabiduría, la comprensión y la sanación que ni siquiera andábamos conscientemente buscando.

Con el abrazo del arte te abrazo,

y con la sutileza de todas las cosas bellas que perfuman este Mundo.

Zulema.