Como conectar con tus hijos emocionalmente cuando tienen problemas

Quiero compartir una reflexión sobre como atendemos emocionalmente a nuestros hijos, yo el primero, para integrar lo que he descubierto al respecto y el impacto que está teniendo sobre mi relación con ellos

Como padre de tres hijos no es de extrañar que día si y día también surjan conflictos en su vida y entonces es cuando llegan a casa y los comparten cuando estamos en el punto clave de la situación.

Por mi experiencia, el mayor siendo adolescente y yo con mis conocimientos en su momento, difícil es que me comparta algo que le duele a no ser que quiera conseguir algo como llamar la atención o permisos, por eso comprendo la diferencia de haberlo hecho o no y la importancia.

En cambio con los dos más pequeños se observa casi a diario, esta es la situación:

• Hola cariño, que tal?
• bueno....
• ¿te ha pasado algo?
• Si, esto....

y empieza a contarlo.

Yo le escucho, si, le escucho, y procuro con atención, si estoy viendo el móvil, suspenderlo y apartarlo, que sepa que tiene mi atención.

Una vez ha acabado llega el punto clave, yo habitualmente le daba una solución, como adulto resolutivo que soy y ahí esta el punto clave, CUANDO LE DOY UNA SOLUCIÓN NO LE ESTOY ATENDIENDO EMOCIONALMENTE, le estoy diciendo

"Tu emoción no es importante, tus situaciones no son importantes"

Gracias a la lectura, formación y profesionales he comprendido nuevos métodos de comportarme y es lo que quiero compartir.

¿Cómo atenderlo?

Una vez ha acabado de compartir todo lo que desea y ha tenido mi atención completa, yo le digo

PRIMERO: "Es normal que te sientas así con lo que ha pasado, yo también lo estaría" bien sea enfadado, triste o la emoción que nos transmita

de esa forma atendemos y acogemos la emoción como algo habitual en la persona y no como algo que haya que evitar porque son cosas de niños o porque no aportan nada como hacemos al darle soluciones "pues tu dile" o "tu lo que tienes que hacer...." o peor "a mi me pasó...." y entonces le quitamos la atención a ella o a el y la ponemos en nosotros sacando nuestra historia

SEGUNDO: Una vez atendida la emoción y le hemos compartido que estamos aquí con el, que le atendemos, que es normal sentir lo que siente y que le comprendemos, que a nosotros nos pasaría lo mismo, LE DAMOS LA RESPONSABILIDAD DE GESTIONARLO preguntándole "¿Qué te gustaría hacer?"

De esa forma se da cuenta de que las cosas ocurren pero que el tiene el poder de la decisión final de que hacer y como interpretarlas y aprende a acoger lo que viene sin rechazarlo

Muchos adultos no aprendimos esto y nos disociamos de nuestro sentir y nuestras emociones en la infancia y luego hemos de hacer un viaje de vuelta a conectar con nuestro sentimiento y nuestras emociones.

No digo que nuestros hijos estén exentos de ese viaje, ya sabemos que es para todos, pero si que podemos acompañarlos y compartir con ellos información que les ayude a gestionarlo de forma saludable.

¿Y TU, COMO LO ESTAS HACIENDO? ME COMPARTES TU EXPERIENCIA?